Tipos de cerramientos de aluminio y cómo elegir el más adecuado

Si estás reformando tu casa o construyendo una nueva, los cerramientos de aluminio son una opción muy elegida. Estos cerramientos incluyen puertas, ventanas y persianas que se instalan para cerrar espacios y proteger tu hogar. Son duraderos, bonitos y fáciles de mantener.

Muchas personas no saben qué tipo de cerramiento les conviene más. Hay diferentes modelos, materiales y formas de apertura. Y si eliges mal, podrías perder comodidad, luz natural o incluso dinero en el futuro.

Por eso, aquí te explicamos los tipos más comunes de cerramientos de aluminio. También te contamos qué tener en cuenta para que elijas el que más se adapte a tu casa y a tus necesidades.

Cerramientos correderos para aprovechar el espacio

Los cerramientos correderos son los que se deslizan hacia un lado. Se usan mucho en balcones, terrazas o patios. No ocupan espacio al abrirse, por eso son muy prácticos si el lugar es pequeño.

Además, dejan pasar mucha luz. Si quieres conectar una zona interior con el exterior, esta es una muy buena opción.

Ahorra espacio al no abrirse hacia dentro o fuera.
Son fáciles de limpiar y mantener.
Dejan entrar mucha luz natural.

También puedes combinar este tipo de cerramiento con una persiana de aluminio para controlar mejor la luz.

Cerramientos abatibles que aíslan del frío y el ruido

Los cerramientos abatibles se abren como una puerta normal, hacia dentro o hacia fuera. Son muy buenos para aislar el frío, el calor y el ruido. Se recomiendan mucho para habitaciones o salones. Las ventanas de aluminio abatibles también ayudan a ventilar mejor tu casa, porque puedes abrirlas por completo.

Son muy herméticos.
Reducen el ruido exterior.
Mejoran la eficiencia energética.

Este sistema es muy usado en casas que necesitan buen aislamiento, como las que están cerca de calles con tráfico.

Cerramientos plegables para espacios grandes

Los cerramientos plegables se abren como un acordeón. Las hojas se pliegan y quedan recogidas en un lado. Se usan mucho en salones amplios, terrazas o locales comerciales.

Aunque suelen ser más caros, permiten abrir un espacio por completo y conectar dos zonas de forma práctica.

Apertura total sin obstáculos.
Son elegantes y modernos.
Ideales para casas con jardín o terraza.

También puedes usarlos como puerta de aluminio principal en zonas que dan al exterior.

Cerramientos fijos para zonas con vistas o luz natural

Un cerramiento fijo no se abre. Su función es cerrar una zona, dejar pasar la luz o proteger un espacio sin necesidad de apertura. Se usa en entradas, escaleras, patios o como parte de otros cerramientos. Sirve para iluminar una zona y hacerla más segura, sin perder visibilidad.

Dejan pasar mucha luz.
No tienen partes móviles, así que duran más.
Son buenos para zonas interiores o decorativas.

Además, pueden combinarse con ventanas de aluminio o puertas móviles para mayor funcionalidad.

Tipos de puertas de aluminio y cuándo usarlas

Cuando se habla de puerta de aluminio, no hay una sola opción. Todo depende del lugar donde se va a instalar. No es igual una puerta de entrada que una de balcón o de trastero. Estas son algunas opciones comunes:

Puertas abatibles. Las clásicas, seguras y resistentes.
Puertas correderas. Para balcones o patios.
Puertas plegables. Para grandes accesos o jardines.

Así que preferir bien tu puerta de aluminio hace que tu casa sea más cómoda y segura.

Persianas de aluminio para proteger y oscurecer

Las persianas de aluminio se usan junto con las ventanas para regular la entrada de luz y proteger el interior. Son más resistentes que las de otros materiales y duran muchos años sin mantenimiento. Además, ayudan a mantener la casa fresca en verano y caliente en invierno.

Controlan la entrada de luz.
Aíslan del calor y del frío.
Aportan seguridad extra.

También, puedes elegirlas con sistema manual o motorizado, según tu comodidad.

Aluminios puertas y ventanas todo en uno

Cuando hablamos de aluminios puertas y ventanas, nos referimos a sistemas completos que incluyen cerramiento, estructura y acabado. Estos productos combinan resistencia con diseño y son muy usados en reformas completas.

El aluminio se adapta a estilos modernos y clásicos. Además, hay muchos colores y acabados disponibles.

Son fuertes y no se deforman con el tiempo.
Tienen muchas opciones de diseño.
No necesitan pintura ni mantenimiento especial.

Muchas tiendas especializadas te ofrecen soluciones a medida, para que elijas lo que mejor se adapte a tu espacio.

Qué tener en cuenta antes de elegir un cerramiento

Antes de comprar o encargar tus cerramientos de aluminio, es importante analizar bien el lugar donde se instalarán. No todos los tipos funcionan igual en todos los espacios. También debes considerar si buscas más luz, más ventilación o más seguridad. Según eso, escoges entre una ventana, una puerta o una persiana.

Mide bien el espacio disponible.
Define si el uso será interior o exterior.
Consulta siempre a un profesional.

Algunas empresas ofrecen visitas o presupuestos sin compromiso para ayudarte a decidir con más seguridad.

Un buen cerramiento mejora tu casa y tu vida

Los cerramientos de aluminio no solo cambian el aspecto de tu casa, también mejoran tu día a día. Ayudan a ahorrar energía, te protegen del ruido y te dan mayor comodidad.

No hace falta cambiar todo a la vez. Puedes empezar por una ventana de aluminio, una puerta de aluminio o incluso una persiana de aluminio. Lo importante es elegir bien y confiar en empresas que trabajen con calidad.

Así aprendes cómo, con una buena elección, tu hogar es más cómodo, estético y más eficiente.