La fisioterapia pélvica es una especialidad clave para la rehabilitación y fortalecimiento de los músculos del suelo pélvico, fundamentales para el control de la vejiga, el intestino y el bienestar general. Muchas mujeres sufren problemas relacionados con esta área, especialmente tras el embarazo o en la menopausia.
Este artículo explora en detalle cómo la fisioterapia pélvica puede ayudarte a mejorar tu calidad de vida y prevenir problemas de salud.
¿Para quién está recomendada la fisioterapia pélvica?
La fisioterapia pélvica está recomendada para mujeres que sufren problemas como la incontinencia urinaria, prolapsos, disfunción sexual o dolor pélvico. También es muy beneficiosa en el postparto, para ayudar a las mujeres a recuperar la fuerza y funcionalidad del suelo pélvico tras el embarazo.
Además, muchas mujeres que no presentan problemas evidentes pueden beneficiarse de este tipo de fisioterapia como medida preventiva. Los fisioterapeutas especializados en suelo pélvico pueden evaluar el estado de tus músculos y recomendarte ejercicios para mantenerlos fuertes y saludables.
Mejora tu salud con fisioterapia pélvica.
¿Qué incluye una sesión de fisioterapia pélvica?
- Evaluación inicial. En la primera consulta, el fisioterapeuta especializado evaluará el estado de tus músculos del suelo pélvico. Esto puede incluir una exploración física y una revisión de tu historial médico para identificar problemas específicos.
- Plan de ejercicios personalizados. A partir de la evaluación, el fisioterapeuta diseñará un plan de ejercicios adaptado a tus necesidades. Estos ejercicios pueden incluir Kegels, estiramientos, posturas de yoga y técnicas de respiración que ayudan a mejorar la funcionalidad del suelo pélvico.
- Terapias manuales. Algunas sesiones también pueden incluir terapias manuales que ayudan a relajar los músculos del suelo pélvico y a mejorar la circulación sanguínea en la zona.
- Educación y prevención. El fisioterapeuta te enseñará cómo realizar correctamente los ejercicios para el suelo pélvico en casa y te dará consejos para prevenir futuros problemas. Esto puede incluir cambios en tu postura, técnicas para levantar peso de forma correcta y consejos sobre la hidratación y la nutrición.
Ejercicios clave en fisioterapia pélvica.
- Ejercicios de Kegel. Son los más recomendados para fortalecer los músculos del suelo pélvico. Consisten en contraer y relajar los músculos que controlan el flujo de la orina. Este ejercicio es muy eficaz para mejorar el control sobre la vejiga y prevenir la incontinencia urinaria.
- Puente o elevación de caderas. Este ejercicio también es muy efectivo para el suelo pélvico y los glúteos. Acuéstate boca arriba con las rodillas dobladas y los pies apoyados en el suelo. Eleva la cadera hacia el techo mientras contraes los músculos del suelo pélvico. Mantén la postura durante unos segundos y baja lentamente. Repite el ejercicio varias veces.
- Postura de gato-vaca. Este ejercicio, común en el yoga, ayuda a mejorar la flexibilidad de la columna y a fortalecer el suelo pélvico. Colócate a cuatro patas, con las manos y rodillas apoyadas en el suelo. Arquea la espalda hacia arriba (gato) y luego bájala hacia abajo (vaca), mientras mantienes contraídos los músculos del suelo pélvico.
- Sentadillas profundas. Son excelentes para activar los músculos del suelo pélvico y fortalecer las piernas. Mantén los pies a la altura de las caderas, flexiona las rodillas y baja lentamente mientras mantienes el suelo pélvico contraído.
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¿Cuáles son los beneficios de acudir a un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico?
- Mejora de la calidad de vida. Muchas mujeres que han experimentado problemas como la incontinencia urinaria o el dolor pélvico notan una mejoría significativa tras acudir a un fisioterapeuta especializado. La rehabilitación del suelo pélvico puede reducir o eliminar estos síntomas, mejorando tu bienestar general.
- Rehabilitación postparto. Después del parto, los músculos del suelo pélvico pueden debilitarse considerablemente. Un fisioterapeuta especializado te ayudará a recuperar la fuerza y funcionalidad de estos músculos, facilitando tu recuperación y previniendo problemas a largo plazo.
- Prevención de prolapsos. El debilitamiento del suelo pélvico puede llevar a que los órganos abdominales desciendan, lo que se conoce como prolapso. La fisioterapia pélvica puede fortalecer los músculos y evitar que esto ocurra, o en su defecto, mejorar los síntomas si ya se ha producido.
- Mejora de la salud íntima. Un suelo pélvico fuerte también puede mejorar la salud sexual. Al fortalecer los músculos que rodean la zona pélvica, muchas mujeres experimentan un mayor control muscular y una mayor satisfacción en su vida íntima.
Consejos adicionales para el cuidado del suelo pélvico.
- Evita el estreñimiento. El esfuerzo prolongado al intentar evacuar puede debilitar los músculos del suelo pélvico. Mantén una dieta rica en fibra para favorecer una digestión saludable y evitar el estreñimiento.
- Levanta pesos de manera adecuada. Si necesitas levantar objetos pesados, flexiona las rodillas y mantén la espalda recta para no ejercer presión innecesaria sobre el suelo pélvico.
- Mantén una buena hidratación. Beber suficiente agua a lo largo del día ayuda a que los músculos del suelo pélvico funcionen correctamente y evita problemas relacionados con la vejiga.
- Realiza ejercicios pélvicos regularmente. Incorporar ejercicios como los Kegel o las sentadillas en tu rutina diaria puede mantener los músculos del suelo pélvico fuertes y saludables. Además, estos ejercicios pueden realizarse en casa sin necesidad de equipo especial.
¿Cuándo acudir a un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico?
Si experimentas síntomas como la pérdida de orina al estornudar, dolor en la zona pélvica, sensación de pesadez o prolapso, es importante que acudas a un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico. Este profesional podrá diagnosticar tu estado y ofrecerte un tratamiento personalizado que incluya ejercicios y técnicas de rehabilitación adaptadas a tus necesidades.
También es recomendable acudir a un fisioterapeuta especializado después del parto, para asegurarte de que los músculos del suelo pélvico están recuperando su fuerza y funcionalidad de forma adecuada.
Agenda una consulta con un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico.
